Situada en la llamada Ruta del Toro, dentro del Parque de los Alcornocales, cerquita de Cádiz, Alcalá de los Gazules es una sugerente y bella localidad de apenas seis mil habitantes que, a pesar de estar en el interior, asemeja a un pueblecito marítimo. Calles empinadas y adoquinadas, casas encaladas, frescos patios interiores...
En la parte más alta de la población nos espera la iglesia mayor, dedicada a San Jorge. Una magnífica portada gótica nos muestra la iconografía clásica de caballero que vence al mal, representado en el dragón, y libera a una dama.
Una vez dentro, además de contemplar la magnífica talla de la Virgen del Rosario, primera imagen documentada del genial Martínez Montañés, nuestros ojos se detienen en el impresionante coro, con una sillería ejecutada en 1741, obra del escultor jerezano Agustín de Medina y Flores.
Sobre él, un órgano, también de grandes dimensiones. Constituye un instrumento de 3 fuelles y 6 registros, fabricado en 1775 por Francisco Pérez de Valladolid, músico mayor de la Dignidad Arzobispal de Sevilla. Fue reformado en 1904 por el organero francés Alfredo Heulard, quien le añadió nuevos registros.
Recientemente y bajo la dirección de Andrés Cea Galán ha sido restaurado por el organero Federico Acitores, a expensas de la Junta de Andalucía.
Así luce. Para orgullo del pueblo y asombro de los turistas.
Marfi
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